El té verde ayuda a reducir los niveles de colesterol en sangre y refuerza el sistema inmunitario.
Se obtiene de las hojas frescas del arbusto Thea sinensis o Camellia sinensis, que son sometidas a un proceso de torrefacción y secado tras la cosecha.
A diferencia de otras variedades, el té verde no es fermentado, por lo que mantiene una mínima oxidación. Tiene una historia de uso milenaria —más de 5.000 años en China— y forma parte de lo que se considera una dieta saludable gracias a su poder antioxidante.
Modo de preparación:
- Usar 1 sobre de té por taza.
- Agregar agua hirviendo.
- Dejar reposar durante 5 minutos.
Consumo recomendado: Beber 2 a 3 tazas por día.
Advertencia: Evitar su uso en lactantes y mujeres embarazadas.